Recien Nacido II 2024

DEPRESIÓN POSPARTO ≠ BABY BLUES

Tanto el Baby blues como la depresión posparto son dos fenómenos comunes que podrían suceder después del nacimiento del bebé. Es completamente normal que experimentes cambios bruscos de humor, tengas ganas de llorar y te sientas confundida respecto a la nueva etapa que estás viviendo. Por ello, es muy importante que reconozcas los síntomas del Baby blues y la depresión posparto para no descuidar tu salud emocional.

Depresión posparto, cuando la tristeza persiste

  • Su característica predominante es que sucede después del parto y puede durar hasta un año después del nacimiento del bebé.
  • Sus síntomas principales son irritabilidad, tristeza, insomnio, ansiedad, ausencia de libido, pérdida o aumento del apetito y fatiga (tanto a nivel físico como emocional).
  • Si bien la depresión posparto también tiene una causa hormonal, en ella también intervienen factores como: dificultad para adaptarse a los cambios, la preocupación sobre la capacidad de ser madre y las expectativas irracionales sobre la maternidad (sobre todo en los primeros meses), y la falta de sueño.

La depresión posparto requiere de un tratamiento psicológico, por lo que es necesario acudir con un especialista.

Red de apoyo para mamá

La maternidad es un momento hermoso y único, pero también es un reto que la mujer debe afrontar. Por tal razón, entre más aliados tenga mamá, mejor.  Si te ofrecen ayuda, acéptala, no tienes que hacer todo tú sola; esto, además de aligerar tu vida, contribuye a que descanses. Igualmente, si te sientes triste, es muy valioso que cuentes con alguien de confianza con quien puedas platicar y, si llevas más de tres meses sintiéndote irritable y triste, lo mejor que puedes hacer es acudir con un psicólogo.

Baby blues: tristeza posparto

Se conoce como la versión leve de la depresión posparto: la reciente mamá se siente triste sin explicación.

La tristeza viene acompañada de irritabilidad, decaimiento emocional, cansancio, cambios bruscos de humor y, en algunos casos, llantos espontáneos.

Normalmente aparece unas horas o días después del parto y puede prolongarse hasta dos semanas.

No afecta las actividades diarias de la mamá ni le resta autonomía. Aún se desconocen las causas específicas, pero se cree que los cambios hormonales son los responsables del Baby blues; además, la falta de sueño de las primeras semanas más el cansancio acumulado del embarazo y el trabajo de parto propicia a que la mujer esté más susceptible.

SOBREVIVE A SU PRIMER DÍA

¿Ya te habías imaginado cómo sería tu vida una vez que tuvieras a tu bebé en tus brazos? La llegada de tu bebé es una de las cosas más bonitas que te puede suceder, y algo que definitivamente cambiará tu vida para siempre.

PLATICA con tu doctor sobre los cuidados que debes tener, tanto para ti como para tu bebé, una vez que llegues a casa. Pregúntale todo, hasta lo más obvio. Debes estar prevenida para cualquier situación.

ORGANIZA las próximas citas con el pediatra. Agenda las consultas a las que tendrán que acudir para la revisión periódica de tu pequeño o para que le apliquen las vacunas que le corresponden.

TÉCNICAS para atender a tu bebé. Aprovecha tu estancia en el hospital para aprender todo de las enfermeras: cómo cambiarle el pañal, amamantarlo, bañarlo y limpiar su cordón umbilical, que deberás asear a diario para evitar infecciones.

LIMPIA la casa. Pídele a algún familiar o contrata a alguien para que haga la limpieza de tu hogar, así cuando regresen a ella podrás dedicarte por completo a tu bebé.

Ten tus contactos actualizados. Guarda en los “Favoritos” de tu celular los números de las personas de las que necesitarás ayuda: tu pareja, tus papás, el médico, tus amigos, etcétera.

ROPA AL SALIR DEL HOSPITAL

Prepara dos maletas pequeñas, una con tu ropa y otra con la del bebé. No olvides incluir los artículos de higiene y una cobijita para cubrirlo al salir.

EL PRIMER DÍA EN CASA

Una vez que sales del hospital quizás pienses que tu bebé estará tranquilo, dormirá todo el día y no causará ningún problema. En realidad, su primer día en casa puede ser más complicado de lo que crees porque a pesar de que lo aman profundamente, tú y papá, apenas lo conocerán realmente. Hay cosas que nadie te dice sobre el primer día del bebé en casa pero no hay nada que no puedas superar:

ES CASI SEGURO que les falten ciertas cosas que les faciliten su cuidado. Tu pareja y tú tendrán que hacer equipo, por lo que es muy probable que papá tenga que salir corriendo a comprar lo que necesites.

TEN PRESENTE la temporada del año en la que estás, pues durante el primer mes de vida, tu hijo está desarrollando y ajustando su capacidad de termorregulación, por lo que dependerá de ti que no tenga frío o calor.

TOMAS. Tu recién nacido te pedirá que lo alimentes cada dos o tres horas durante el día y la noche, los 7 días de la semana. Así que busca un lugar cómodo, adopta una buena postura para hacerlo y tómate el tiempo necesario.

SI TU BEBÉ necesita algo o no se encuentra bien, llorará. Te sugerimos que lo vistas con ropa cómoda para que esté a gusto, cuida que la habitación donde esté sea cálida y no haya ruidos fuertes que lo perturben.

AYUDA. La dinámica de la casa se modifica con la llegada de un bebé, te sugerimos que aceptes o pidas ayuda a las personas en quienes confías: tu mamá, tu suegra, una amiga; ellas pueden hacer las compras del supermercado, el quehacer, preparar la comida y hacerte compañía.

VÍNCULO MATERNO

Entre más contacto piel a piel, abrazos y caricias, la relación mamá-bebé favorecerá su desarrollo.

Video Player

LAS PRIMERAS FOTOS DE TU BEBÉ

Te damos algunos consejos súper útiles para captar a través de la fotografía, la ternura, inocencia y belleza, de tu recién nacido en sus primeros días de vida. ¡Te vas a enamorar más de él!

Las fotos más bonitas son aquellas que se hacen a buena hora del día, con luz natural.

  • La cámara es el elemento primordial de esto. Hoy en día, las cámaras de los smartphones manejan una muy buena resolución y captan imágenes muy nítidas y exactas, así que revisa si la de tu celular te servirá o recurre a la que utilizaste para tomar fotos en tu boda o baby shower. Tip: tenla a la mano siempre.
  • En tu casa, busca la habitación con mejor luz para fotografiar al bebé. Si la luz es muy fuerte o le da mucho el sol, cubre las ventanas con una sábana blanca para que la difumine y no produzca sombras muy marcadas en su cara o cuerpecito.
  • No le tomes la foto dentro del moisés o cuna porque su carita saldrá muy oscura, mejor acuéstalo en la cama o en algún sillón. Lo que esté más cerca de una ventana para que reciba toda la luz disponible.
  • El blanco y los colores claros son los más recomendables para usarlos de fondo. El primer color actúa como reflector natural y proporciona más luz al bebé, lo cual es importante si en la habitación no hay buena luz. Los colores pastel aportan calidez y ternura a la imagen, justo lo que se busca para este tipo de fotos.
  • Toma fotos desde diferentes posiciones buscando distintas perspectivas. Puedes agacharte y tomar una a su altura o captar la imagen desde arriba, también puedes alejarte y hacer una foto en la que se muestre lo pequeño qué es en la inmensidad de la cama, el sofá o área en la que esté.
  • Un buen momento para hacer la sesión de fotos es después de darle de comer, solo no lo muevas mucho y envuélvelo en una sabanita bonita para que se sienta a gusto.
  • No utilices muchos elementos decorativos ni peluches para fotografiarlo porque el bebé todavía es muy pequeñito y le roban  protagonismo.
  • Es súper lindo captar los detalles de sus manos, pies, boquita, de algún puchero o sonrisa, que hizo. Debes estar muy atenta a cada uno de sus movimientos.
  • Aprovecha y acuéstate a su lado o detrás de él/ella para que papá o alguien más los fotografíe juntos.
  • Los recién nacidos son felices cuando adoptan la posición de “hechos bolita” porque es como habían estado dentro del vientre hasta que nacieron. Cuando esté dormido prueba alguna postura de ese tipo. Si te resulta difícil acomodarlo, deja que tome la posición que más le guste. Antepón su comodidad a las posturas forzadas.
  • No olvides descargar las fotos a una computadora para que después puedas imprimirlas y ponerlas en un portarretrato o álbum, o también puedes compartirlas en tus redes sociales y darles la primicia a tus familiares y amigos de lo bonito que es tu bebé. ¡Serán uno de los más lindos recuerdos de tu vida!
  • No te empeñes en tomarle fotos si no ha tenido un buen día o si ves que está nervioso o incómodo. Déjalo para otro momento.
  • Su seguridad es lo más importante. No lo pongas en la orilla de la cama o del sofá y no trates de meterlo en cestos u otro tipo de recipientes sin la información adecuada.

Video: Fontanelas del bebé:
6 preguntas resueltas

¿Preocupada por las fontanelas de tu bebé?  Descubre las respuestas a las 6 preguntas más comunes y cuida su desarrollo sin preocupaciones.

Video Player

CRIANZA CON APEGO Y PORTEO

Desde el punto de vista de la psicología, el vínculo materno es fundamental para el desarrollo del individuo a nivel intelectual y emocional. La crianza con apego es una filosofía que contribuye a la consolidación de la relación mamá-bebé. ¡Conócela!

El apego es el comportamiento que se manifiesta en una persona que mantiene la cercanía de otra -considerada capaz de enfrentarse al mundo de manera adecuada-; por tal razón, es más evidente en los niños, pues dependen de sus padres. Sin embargo, el apego es un mecanismo activo durante toda la vida. A nivel biológico, proporciona la protección que permite la supervivencia de la especie, defendiendo a los integrantes más débiles de peligros y amenazas.

¿Qué es la Teoría del Apego?

Diversos psicoanalistas y psicólogos dedicaron sus investigaciones a la relación entre padres e hijos, y la influencia de ésta en el desarrollo del individuo; no obstante, se considera a John Bowlby como el padre de la Teoría del Apego. En su informe Los cuidados maternos y la salud mental (1949), presentado a la OMS, señala que la Teoría del Apego presta atención a las relaciones que el niño construye desde los primeros años de vida con la figura principal que se encarga de su cuidado -principalmente la madre-, pues influirán en su desarrollo emocional e intelectual posteriores.

Crianza con apego (Attachment Parenting)

El término, muy de moda, consiste en una filosofía educacional basada en la Teoría del Apego, donde el contacto persistente entre papás y bebé es el protagonista. De acuerdo con Attachment Parentig International, la crianza con apego consta de 8 principios:

Prepararse para el embarazo, el parto y la crianza

Cuando los padres se preparan, propician un ambiente tranquilo que les permite cuidar de la nueva vida que se está gestando. Informarse sobre el nacimiento, el parto, cuidados y prácticas de crianza les permite tomar mejores decisiones.

Alimentar con amor y respeto

La alimentación también es un acto de amor, por lo que es fundamental garantizar al bebé la lactancia materna exclusiva, un alimentación complementaria saludable y variada, así como un destete progresivo.

Responder con sensibilidad

El llanto es el lenguaje característico del pequeño, a través de éste comunica a sus padres su necesidades y, cada vez que son satisfechas, el pequeño adquiere la confianza de que mamá y papá están ahí para cuidarlo y protegerlo.

Contacto corporal

El contacto físico, desde que nace el bebé, origina cercanía, afecto, seguridad, estímulo y movimiento. Por ello, abrazos, besos, caricias y otros gestos, como cargarlo o darle masajes, son bienvenidos. Asimismo, el porteo* es una práctica muy estimulante para el bebé.

Participar activamente en las rutinas de sueño

Se refiere a continuar atendiendo las necesidades del bebé durante la noche y evitar caer en técnicas para “entrenar” el sueño del niño. La crianza con apego fomenta el colecho.

Proporcionar amor y cuidado constante

El cuidado diario, la alimentación y el juego son factores que contribuyen a consolidar la relación entre padres e hijos, por lo que es imprescindible aprovechar esos momentos.

Usar disciplina positiva

Una disciplina basada en la empatía, el amor y el respeto influirá positivamente en la relación papás e hijos. En lugar de reaccionar a una conducta, hay que buscar su origen para darle solución juntos.

Equilibrio entre la vida personal y familiar

Si bien el bebé se vuelve una prioridad en la vida de los padres debido a que no es capaz de satisfacer sus necesidades por sí solo, es necesario ser conscientes de que el pequeño es un integrante más de la familia y que las necesidades propias y de los otros integrantes también son importantes.

*Beneficios del porteo

El porteo es una práctica que ha ido ganando terreno en los últimos años, ya que proporciona tranquilidad al bebé y estrecha la relación entre él y sus padres. Consiste en llevar al bebé pegado al cuerpo, de esta forma los padres no lo descuidan, pero mantienen total libertad de movimiento.

Ventajas de llevar a tu hijo cerca de ti…

  • Favorece una postura adecuada de las caderas, pues el bebé se mantiene en una posición con las piernitas abiertas.
  • Fomenta el bienestar emocional del pequeño al estar en contacto con el cuerpo de mamá o papá.
  • Previene la plagiocefalia, una deformidad en la cabeza de los bebés que tiene su origen en las malas posturas.
  • Recibe cercanía, calor y cariño.
  • Fortalece los músculos de la espalda.
  • Disminuye el llanto y le brinda tranquilidad.
  • Activa el sentido del equilibrio.
  • Facilita las habilidades de socialización.

Tips para crear un vínculo seguro entre padres e hijos

  • Entender la señales del niño y su forma de comunicarse.
  • Crear una base de seguridad y confianza.
  • Responder a sus necesidades.
  • Abrazarlo, acariciarlo, mostrarle cariño y jugar con él.
  • Cuidar su bienestar físico y emocional.

REGRESO AL TRABAJO:
¿SERÉ CAPAZ DE DEJAR A MI BEBÉ?

Apenas estás conociendo a tu bebé y te estás adaptando a tu nueva vida cuando la incapacidad por maternidad llega a su fin. Uno de los retos más grandes que enfrenta la reciente mamá es el regreso al trabajo, por ello, te damos algunos consejos para que esta transición sea lo menos difícil posible.

El nacimiento del bebé inaugura una nueva etapa en la vida de la mujer y los cambios pueden ser muy abrumadores. Entre la falta de sueño, los cambios fisiológicos y la montaña rusa hormonal, regresar al trabajo puede ser un asunto agobiante; además, tendrás que prepararte para dejar a tu pequeño al cuidado de alguien más.

Cada que te vayas, despídete de tu hijo con un beso afectuoso pero rápido, siempre recordándole que volverás.

¡Organízate!

Tanto si trabajas como freelance como si tienes un horario de oficina, la organización es fundamental: Realiza calendarios o lleva una agenda (en tu celular o física) en donde registres todas las actividades del trabajo y la casa. Si anotas todo en el teléfono celular, activa las notificaciones y alarmas. El orden te ayudará a saber qué es lo que tienes qué hacer y reducirá el estrés.

¡Adiós, culpa!

Es completamente normal que experimentes sentimientos encontrados, pero es importante que estés consciente de que no eres una mala madre por dejar a tu hijo y regresar al trabajo. Asimismo, no recurras a suplir tu “ausencia” con actitudes sobreprotectoras o cediendo a todos los deseos y caprichos del pequeño.

¿Seré capaz de dejar que otra persona cuide de mi bebé?

Esta es la parte más complicada del proceso, sin embargo, debes confiar en que tu bebé estará en buenas manos y que no eres una mala madre por dejarlo. Sigue estos consejos:

Analiza tus opciones. Si no hay alguien en casa que pueda cuidar del pequeño, la mejor opción será una guardería.

Infórmate bien sobre las guarderías que estén cerca de tu trabajo o casa: horarios, días laborables, periodos vacacionales, etcétera.

Prepara a tu hijo. El bebé también tiene que acostumbrarse a los momentos en los que tú no estés. Un ejercicio de práctica es que te escondas, dejes pasar unos segundos y vuelvas  a aparecer; así tu hijo sabrá que siempre volverás.

Acepta y confía plenamente en que otra persona puede cuidar de tu bebé.

¡BIENVENIDA A LA COMUNIDAD
DE MAMÁS MÁS GRANDE DE MÉXICO!

Junto con nuestra revista estás recibiendo las Agendas de Embarazo o Crecimiento de tu Bebé, e información personalizada especialmente diseñada para ti. Además, podrás participar en dinámicas y ganar uno de los 1,000 regalos que obsequiamos entre nuestras suscriptoras o abridoras de nuestros emails, o mamás que visitan nuestro sitio web o contestan nuestras encuestas.

LA LACTANCIA EN EL TRABAJO

En México, solo el 14.4% de las mujeres practican la lactancia materna exclusiva, lo que ubica a nuestro país en el penúltimo sitio de Latinoamérica.

HORA DE LA LACTANCIA

Lo que se conoce como la Hora de lactancia, de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo, consiste en que durante los primeros seis meses de vida de un bebé, la mamá tiene el derecho de usar 60 minutos de su jornada laboral para lactar a su pequeño, es decir, realizar dos reposos al día de media hora cada uno, en un lugar que designe su empresa con las condiciones de higiene adecuadas.

Cuando esto no sea posible, previo acuerdo con el patrón, se reducirá una hora su jornada de trabajo durante el periodo señalado.

  • La Hora de lactancia funciona igual tanto si se trata de lactancia natural como si es artificial, al igual que si el hijo es biológico o adoptado.
  • Si en tu trabajo realizas turnos de 24 horas de duración, tienes derecho a una hora de lactancia por cada 8 horas de trabajo (es decir, tres horas).
  • Si se trata de un parto múltiple, tendrás una hora de lactancia por cada hijo.
  • En casos especiales, en los que el trabajo desempeñado por la madre resulte incompatible con la lactancia, ésta puede solicitar un cambio de puesto o funciones y, en caso de no ser posible, se puede declarar a la trabajadora en situación de suspensión del contrato por riesgo durante la lactancia. Si se produce esta circunstancia, la madre tendrá derecho a un subsidio del 100% de la base reguladora, al igual que con la prestación económica por riesgo durante el embarazo.

¿Sabías que si estás asegurada por el IMSS tienes derecho a ayuda en especie por 6 meses de lactancia?

TIEMPO DE PAPÁ y BEBÉ

Da igual si son primerizos o ya tienen el equipo de futbol completo, lo cierto es que soltarás más de una carcajada con lo que te vamos a contar a continuación: ¿cuál ha hecho ya tu marido?

  • Llama a sus aliados (amigos) para que lleguen a su rescate y lo ayuden con las tareas de la casa, aunque la casa termine peor de lo que la dejaste.

  • Si llega a salir al supermercado, usa alguna de sus chamarras (grandes y anchas) como portabebés. ¿Qué tal el ingenio? Te la mata, ¡eh!

  • Por fin sabe lo que es cambiarle el pañal y se disfraza como si fuera a fumigar una casa llena de cucarachas porque sino se vomita con el olor.

  • Hace la hora del baño más divertida. Pone su música favorita, le canta y baila con tu pequeño, le hace pelucas con la espuma del shampoo, en fin, nunca habías escuchado la risa de tu bebé tantas veces como hasta hoy.

  • Transforma la casa en un parque temático… y cuando regresas a casa te tropiezas cada dos pasos.

  • Lo cierto es que todos los papás caen rendidos de amor por su bebé. Hasta los hombres más duros se vuelven los más tiernos del mundo cuando su hijo les regala una sonrisa, un besito o los abraza. ¡Amor puro!

  • La carita del bebé se convierte en una bola de plastilina en sus manos. Le pellizca los cachetes, la nariz, la boquita, mientras le habla en un idioma que solo él entiende.

  • Cambian el look de tu hijo sin consultártelo. Desde el peinado más locochón, hasta arremangarle o cortar su ropa para darle un nuevo estilo.

Video Player

También te puede interesar

Primer mes del bebé
Lactancia materna ¿sabías que...?
Trabajo, mujer y mamá
Tu bebé recién nacido

Comments are closed, but trackbacks and pingbacks are open.